Ella tenía alas de mariposas, soñaba con poder volar, un día se quedó dormida bajo un cielo celestial.
Una estrella muy brillante se acercó y su destello la despertó, cuando observó su cuerpo estaba lleno de pequeñas mariposas formando un bello arcoíris en su cabello, se levantó suave no deseaba que ellas vuelen, con suaves pasos se dirigió al mar observo su reflejo y un antifaz con bellas alas decoraba su rostro.
La estrella seguía a su lado cuando levantó su mirada una tenue vos le dijo, vuela niña tu deseo se concretó, ve de flor en flor, toma su néctar para que ese corazón se siga endulzando, acaricia con esa bella alma la calidez del día, deja que la brisa hamaque tus alas.
Vuela mi niña porque tuyo es el cielo, aletea como nunca lo has hecho, porque eres dueña de tus fantasías y no existen sueños muertos si uno les regala vida.
Recorre el camino de la mano de tu inocencia pero cuando la adultez toque tu puerta no abandones ese arco iris que te que te permitió volar.
Autor: Emilce,Elizabeth,Esnarriaga. Imagen: sacada de la web. . Fecha: 17/01/2014. Todos los derechos de autor reservados